Vamos hoy con una tarta fresca, frutal y sin horno, que desde que la ví en el blog de María Lunarillos no veía la hora de hacerla. Ideal porque integra frutos rojos, en este caso frambuesas con todo su aporte de minerales, fibra y vitamina C. Y por si fuera poco, es tan colorida que apasiona solo de verla. La frambuesa es un fruto típico de los bosques europeos. Y aunque hoy en día la podemos encontrar en todos los mercados del mundo, cuando yo era pequeña, en Sud América solo la conocíamos por los cuentos. Pero dejémonos pues de cuentos y vamos a por la tarta. Deciros también que podemos usar otros frutos rojos, en cuyo caso endulzaremos según el gusto.

Ingredientes:

100 g galletas tipo María ( para la base)
75 g mantequilla ( para la base)
30 g zumo de limón
700 g frambuesas
6 láminas gelatina en polvo
180 g azúcar
300 ml nata, mínimo 35% MG, bien fría
1 cucharada sopera azúcar glass para decorar

Procedimiento

Modo Tradicional

1. Primeramente preparamos un molde redondo y alto de 18 cm-20 cm, rociándolo con spray antiadherente y poniendo un papel de horno en la base.
2. Trituramos bien las galletas, con un robot o poniéndolas en una bolsa zip y pasando el rodillo de amasar. Mezclamos con la mantequilla derretida, y forramos la base del molde, cohesionando bien la masa con el dorso de una cuchara. Llevamos a la nevera mientras continuamos con la tarta.
3. Ponemos a remojar las hojas de gelatina en agua fría.
4. Cogemos 550 g de las frambuesas y las trituramos con una minipimer o batidora. Pasamos las frambuesas trituradas por un colador o chino para quitar las pepitas. Nos tiene que quedar 300 ml de puré. Si nos falta añadimos un poquito de agua.
5. En un cazo ponemos los 300 ml de puré y 100 g de azúcar, y llevamos al fuego hasta que comience a hervir. Apagamos y añadimos las hojas de gelatina revolviendo bien hasta integrar de forma homogénea. Dejamos templar.
6. Montamos la nata con el resto del azúcar con un robot o varillas, sin que quede muy firme.
7. Añadimos el puré de frambuesas ya frío, mezclando de forma envolvente con una espátula hasta obtener una mezcla uniforme.
8. Vertemos la mousse en el molde, sobre el fondo de galletas, alisamos la superficie con la espátula, damos unos golpecitos en la encimera y metemos en la nevera para que solidifique. Es mejor dejarla toda la noche.
9. Desmoldamos con cuidado. Decoramos con el resto de frambuesas y ponemos azúcar glass por encima con un colador.

Con el Robot Moulinex Cuisine Companion

1. Preparamos un molde redondo y alto de 18 cm-20 cm, rociándolo con spray antiadherente y poniendo un papel de horno en la base.
2. Ponemos la mantequilla en el bol equipado con la cuchilla de amasar picar, Derretimos a velocidad 5, 80º durante 3 minutos.
3. Añadimos las galletas machacadas y trituramos 30 segundos a velocidad 11. Volcamos la masa de galletas en el molde, repartimos y presionamos bien con el dorso de una cuchara. Llevamos a la nevera mientras preparamos la mousse.
4. Ponemos a remojar las láminas de gelatina en un cuenco de agua fría.
5.  Agregamos 550 g de frambuesas en el bol equipado con la cuchilla ultrablade y trituramos las frambuesas a velocidad 10 durante 2 minutos.
6. Pasamos las frambuesas trituradas por un colador, para retirar las pepitas, de forma que nos queden 300 ml de puré de frambuesas.
7. Ponemos el puré de frambuesas y 100 g del azúcar en el bol con la cuchilla ultrablade. Mezclamos a velocidad 7, 80º durante 5 minutos. Cuando falte un minuto añadimos la gelatina escurrida. Reservamos, sin dejar enfriar, solo templar.
8. Mientras, lavamos y enfriamos bien el bol unos minutos en el congelador.
9. Equipamos con el batidor y añadimos la nata bien fría. Vamos a semimontar la nata. Ponemos velocidad 6, sin tapón y cuando empiece a espesar añadimos el resto del azúcar por el bocal. aproximadamente entre 3-4 minutos. Vamos observando, no debe quedar muy firme.
10. Añadimos el puré de frambuesas sobre la nata montada y mezclamos con una espátula y movimientos suaves, y envolventes hasta que quede una mezcla uniforme.
11. Vertemos la mousse en el molde, sobre el fondo de galletas, alisamos la superficie con la espátula, damos unos golpecitos en la encimera y metemos en la nevera para que solidifique. Es mejor dejarla toda la noche.
12. Desmoldamos con cuidado. Decoramos con el resto de frambuesas y ponemos azúcar glass por encima con un colador.