Esta tarta es ideal para las noches de verano, una combinación de sabores que os resultará muy exquisita. Podéis usar un hojaldre casero, tenéis la receta en un post anterior, o uno comprado. Si compráis que sea de mantequilla y no de grasas saturadas. En alguna otro ratito os enseñaré a hacer un hojaldre rápido y un falso hojaldre muy resultón. Este verano, me pondré en algún ratito a haceros un monográfico de masas.

Ingredientes
- 2 planchas de hojaldre
- 500 g de lomos de salmón sin piel ni espinas
- 1 calabacín grande o 2 pequeños
- 2 cebollas dulces grandes, a poder ser de Fuentes.
- aceite de oliva virgen extra
- 50 g de mostaza Dijon
- 2 limones ecológicos
- 80 ml de leche evaporada
- sal
- pimienta negra molida
- 1 huevo
Preparación

Modo tradicional
- Cortamos el calabacín en rodajas. Salamos y rociamos con el zumo de un limón.
- Picamos la cebolla en juliana y rehogamos en una sartén de fondo grueso hasta caramelizar. Primero unos minutos a fuego fuerte y luego bajamos la temperatura al mínimo.
- Es muy importante dejar cocinar a fuego lento, para que la cebolla suelte el azúcar y se vaya caramelizando sin quemarse. Podemos poner una tapa y remover cada tanto, puede llevar una hora aproximadamente.
- Añadimos la mostaza, el zumo del limón y la leche evaporada. Reducimos la salsa, cocinando a fuego medio hasta que espese.
- Salpimentamos. Ponemos en el vaso de una batidora y trituramos. Reservamos.
- Comenzamos estirando un poco una de las láminas de hojaldre, en un círculo de 30 cm de diámetro. Podemos usar una masa redonda o cuadrada. Lo ideal es que sea redonda, pero en mi caso tenía planchas cuadradas de mi hojaldre casero. Comenzamos estirando un poco la masa, en un círculo de 30 cm de diámetro.
- Marcamos un cuadrado o círculo interior a 10 cm del borde.
- Cortamos el salmón en trozos de unos 3 cm de altura y rodeamos la línea marcada. Hacemos unos cortes en la masa y vamos cubriendo el salmón la masa formando una especie de corona.
- Cortamos en trozos de unos 5 cm y giramos de modo que el salmón quede a la vista.
- Cortamos un circulo de unos 10 cm y lo rellenamos con una bola de mozzarella u otro queso al gusto. Cortamos tiras para decorar.
- Rellenamos la corona con la crema de cebolla y mostaza. Adornamos con las rodajas de calabacín,
- En el medio ponemos la bola de queso y unimos con tiras de hojaldre. Pintamos con huevo.
- Horneamos a 180º, calor arriba y abajo, unos 30 minutos.






Con el Robot Moulinex Cuisine Companion
- Con el accesorio cortador cortamos los calabacines . Salamos y rociamos con el zumo de 1 limón.
- Ponemos las cebollas cortadas en juliana en el bol equipado con el mezclador. Si tenemos el accesorio cortador lo podéis usar para no llorar. No me gusta picar en brunoisse para caramelizar, aunque luego lo vayamos a triturar.
- Añadimos el aceite y cocinamos 5 minutos en slow cook P1. Sin tapón
- Programamos velocidad 1 a 90º durante 45 minutos, o hasta que veamos que se ha caramelizado. Con tapón.
- Añadimos la mostaza, el zumo del limón y la leche evaporada. Programamos 20 minutos a velocidad 2, 95º. Sin tapón.
- Salpimentamos. Ponemos la ultrablade y trituramos 2 minutos a velocidad 12.
- Procedemos desde el punto 6 al 13 del Modo tradicional.


